Hace dos semanas nuestro medio anunciaba la creación de una extraña coalición de regidores que, en su empeño de evitar manipulaciones de las castas peledeistas, se unian para exigir ser tomados en cuenta o sea, que se les deje competir.
Dicen, en principio, que los integrantes de la asociación politica pertenecen a varias tendencias dentro del partido gobernante, sin embargo, en medio de una campaña política, compleja, la suspicacia no se hace esperar y aun cuando se dijo que el objetivo era reclamar ser «medidos» democráticamente, los aspirantes lejos de unirse se están marchando, presionados por sus jefes políticos.
Luego de 15 días convocan a un evento en el ambicioso Club Del Legislador donde, se sabia, necesitaban que cada uno de los convocados llevara «gente» y algunos de ellos llegaron solos, en fuerte muestra de debilidad mientras que otros si.
En teoría parecia ser una buena idea, pero el contexto político no le satisface, el evento se vio empañado por la baja participación y desorganización, mientras que la difusión de las fotos «oficiales» y algún que otro video «promocional» vendiendo liderazgos particulares amenaza con socavar el esfuerzo.
El futuro es incierto. Las presiones muchas. Sin embargo, al parecer no serán las «amenazas» o temores a una unión fortuita de aspirantes con algun que otro poder mediático los que decidan lo que el PLD hará con su «democracia» interna y siempre que en el panorama vea la cara de solo un aspirante a alclade en esos aspirantes a regidor la coalición no será vista como un grupo que funciona con intereses grupales sino puntuales.